CONSTRUCCIÓN, PROYECTOS

UNA UTOPÍA EN LA ASIGNACIÓN DE CONTRATOS PARA LA PRESTACIÓN DE SERVICIOS DE LA OBRA PÚBLICA

El sentido de la ética laboral merece destacarse como un pilar fundamental de la actividad profesional, pública y empresarial.

El concepto ético debe entenderse desde una visión de actitud, de enfoque pragmático; como una máxima laboral.

A partir de ello, el actuar éticamente debe ser una premisa gerencial con nobles propósitos, así creamos un ambiente de confianza y un compromiso laboral que promueve el trabajo productivo.

Creo que esté principio, debe ser indispensable para los empresarios de la construcción que trabajan enfocados en desarrollar tecnologías eficientes que optimizan resultados, y de forma especial para las máximas autoridades ejecutivas de las entidades públicas (MAE) que buscan estos servicios.

Aplicando esta máxima, la asignación de contratos para la prestación de servicios de la obra pública, se desarrollaría a partir de la competencia leal entre empresas que pugnan por un determinado proyecto, y así el Estado tendría a su disposición ofertas de alto contenido técnico a precios competitivos.

Entiéndase como competencia leal el luchar con armas licitas para conquistar el mercado y no violar los límites y reglas que establece la ley de partes; reglas de juego claras para todos por igual, sin ventajas externas, colusión e información privilegiada.

La competencia trae consigo retos y oportunidades, nos motiva a desarrollar ventajas competitivas sobre otras firmas mediante la reducción de costos y la superación técnica; llevándonos con el tiempo a alcanzar la calidad total.

El empresario que acepte el reto de ganarse un espacio en la feroz lucha por el mercado en base a competir limpiamente; debe ser audaz, laborioso, creativo y transparente; garantizando con esas premisas la calidad y el precio justo de los productos y servicios que ofrece.

Permítanme una Utopía: Que las Licitaciones Públicas se simplifiquen al extremo, que los oferentes presenten una declaración jurada de suficiencia, afirmando contar con todos los requisitos legales, burocráticos y de experiencia, a ser revisados estos en la compulsa, sólo al ganador.

Concentrando las ofertas comparables en el aspecto técnico y económico, acompañando al presupuesto la justificación clara de su precio, todo esto respaldado con una garantía bancaria de seriedad de propuesta.

La presentación y apertura de sobres de las ofertas se las realiza en un mismo evento público y el oferente con precio más bajo, sale del acto de licitación con la carta de adjudicación.

Todos sabemos que, la mejor manera de medir la eficiencia es encontrar a quien lo hace igual (o mejor) al precio más bajo.

Es muy motivador sentir la íntima gratificación del logro cuando este es el resultado del esfuerzo, talento y capacidad.

Ramiro Martínez Paz
Arquitecto
ramiromartinez@martipazsa.com

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